Foto: Simone Acquaroli
Asuntos jurídicos, políticos y administrativos | 12 jul 18
La palabra remís (y las variantes remis y remise) es una voz tomada del francés que significa ‘automóvil con chofer, cuyo servicio, efectuado por horas o kilómetros de recorrido, se contrata en una agencia’, como indica la Academia Argentina de Letras en el Diccionario del habla de los argentinos.
En los medios de comunicación se encuentran frases como «En crisis: los viajes en remís cayeron más de un 45 por ciento», «Lanzaron en La Plata un servicio de remis solo para mujeres» o «A juicio por violar a una chica en su remise».
Según el Diccionario argentino de dudas idiomáticas, en Argentina alternan tres formas de pronunciación con sus correspondientes grafías: la pronunciación bisílaba aguda (re-mís), con grafía remís, que es la forma generalizada y acorde con la etimología; la pronunciación bisílaba grave (ré-mis), con grafía remis, que se utiliza en el centro del país, y la pronunciación trisílaba grave (re-mí-se), con grafía remise, que es la menos valorada y está actualmente en desuso. Se recuerda que esta última forma debe escribirse en cursiva porque coincide con la grafía francesa. El plural en todos los casos es remises.
Cabe destacar que la forma remís es la única de las variantes que está registrada en el Diccionario de americanismos.
Así —si bien la grafía remís es la forma de uso generalizado y remise, la menos recomendable—, los ejemplos anteriores no se consideran censurables en Argentina.