yihad y yihadista, no jihad ni jihadista
Religión y credos | 17 mar 19
Yihad, que se pronuncia /yihád/ con h aspirada, es la transcripción recogida en la vigesimotercera edición del Diccionario de la lengua española para referirse a la ‘guerra santa de los musulmanes’.
En los medios de comunicación pueden encontrarse ejemplos con las grafías inapropiadas jihad y jihadista: «Sin respuestas ante la jihad, el mundo vuelve a conmoverse», «Claves para entender la Jihad» o «Terrorismo jihadista: aunque pierde poder de fuego, despliega nuevas amenazas».
Aunque en árabe es sustantivo masculino, en español se ha optado por el género femenino. Además, a partir de esta palabra se ha creado yihadista, igualmente válida, que el diccionario Clave define como ‘de la yihad o relacionado con ella’ y ‘partidario o seguidor de la yihad’.
Recordamos que yihad se escribe con minúscula por tratarse de un nombre común.
Así, en los ejemplos anteriores lo adecuado habría sido escribir «Sin respuestas ante la yihad, el mundo vuelve a conmoverse», «Claves para entender la yihad» y «Terrorismo yihadista: aunque pierde poder de fuego, despliega nuevas amenazas».
En cualquier caso, el término árabe yihad significa en rigor simplemente ‘esfuerzo’, por ejemplo, en relación con un trabajo intelectual. En el contexto religioso, apunta en concreto al afán por mejorar como individuo o colectividad dentro del camino espiritual de la fe islámica. De este modo, un yihadista no es en su significado original quien hace la guerra santa, sino quien se esfuerza en la búsqueda de la perfección como fiel musulmán.
No obstante, tal como muestra el Diccionario de la lengua española, yihad se ha asentado en Occidente para referirse de forma exclusiva a la guerra santa de los musulmanes radicales.