Foto: Kate Macate.
Internet | 30 jun 20
Posdata —sin t tras la s y todo junto— es la grafía española aconsejada para la expresión latina post data, utilizada para referirse a la anotación final en una carta, una vez concluida esta.
Sin embargo, en los medios de comunicación se encuentran frases como: «Y, más abajo, agregó una particular post data» o «La nota no tenía fecha ni pos data», donde habría sido preferible escribir posdata.
De acuerdo con el Diccionario de la lengua española, el término posdata resulta de la unión de la forma pos- y el nombre data, definido como ‘nota o indicación del lugar y tiempo en que se hace o sucede algo y especialmente la que se pone al principio o al fin de una carta o de cualquier otro documento’.
Pese a que la vigesimotercera edición del diccionario académico recoge también la grafía tradicional postdata, tanto la nueva Ortografía de la lengua española como el Diccionario panhispánico de dudas recomiendan el uso de la forma simplificada pos-, criterio extensible a cualquier otra palabra con este prefijo, salvo que la base a la que se una comience por la letra ese, en cuyo caso sería más apropiada la forma post (postsocialismo).
Al tratarse de un nombre común y muy frecuente, especialmente en el ámbito epistolar, lo conveniente es escribirlo en minúscula, redonda y todo junto. Su abreviatura correspondiente es P. D., aunque es igualmente válida P. S. (post scriptum), cuyo uso en español no está tan extendido en la actualidad.
Ya se emplee la forma desarrollada o su abreviatura, el texto en sí de la posdata comienza con inicial mayúscula.