Foto: Western Arctic National Parklands.
General | 30 ago 22
La expresión incendio latente, que hace referencia al fuego que continúa ardiendo bajo tierra y que puede volver a prender la superficie seca pasado un tiempo, es preferible a la alternativa incendio zombi.
En los medios de comunicación pueden verse frases como «Incendio zombie: el extraño fenómeno que enfrenta la aldea más fría del mundo», «Incendios ‘zombis’ y covid-19 tras el rebrote de las llamas en Rusia», «Los ‘incendios zombies’ parecen sacados de una película de ciencia ficción, pero son reales» o «Los incendios zombies de Siberia parecen lejanos, pero no lo son».
Para referirse a un incendio que puede pasar un tiempo ardiendo por calcinación a bajo ritmo, incluso sepultado por nieve, y despertar posteriormente, resulta preferible emplear expresiones como incendio latente, incendio de subsuelo o incendio remanente. No solo porque son más precisas y apropiadas, en particular en textos especializados, sino también porque la alternativa incendio zombi, presente en medios generales, ni siquiera se entiende de forma intuitiva y requiere, por tanto, de una posterior aclaración.
Así, en los ejemplos iniciales habría sido preferible escribir «Incendio latente: el extraño fenómeno que enfrenta la aldea más fría del mundo», «Incendios latentes y covid-19 tras el rebrote de las llamas en Rusia», «Los incendios latentes parecen sacados de una película de ciencia ficción, pero son reales» y «Los incendios latentes de Siberia parecen lejanos, pero no lo son».
Si aun así se opta por la expresión incendio zombi, se recuerda que el sustantivo zombi , plural zombis, es la adaptación al español del extranjerismo zombie. Cabe destacar que son válidos los plurales incendios zombi, entendiendo que se trata de dos sustantivos en aposición, e incendios zombis, interpretando que zombi es un adjetivo, como recoge el Diccionario de la lengua española.